sábado, 23 de febrero de 2013

AMOR DE INVIERNO

Sin título de Aëla Labbé

La lluvia resbala por tu jersey de angora, pero te da igual. La playa está desierta y las olas rugen con fuerza. Hundes los dedos en la tierra y juegas a hacer como que me manchas, pero consigo escapar. Corremos y gritamos para ahuyentar el frío, aunque llueva, porque somos salvajes y felices... porque somos libres. Tu boca busca mi lengua entre una maraña de pelos despeinados por el viento. Hueles a camomila y frutos rojos. Trepamos a un árbol para sentirnos niños otra vez, aunque en el fondo sepamos que ya no tenemos edad. Siempre quise tener una casa en un árbol, me dices... y yo te prometo que te construiré una. Es mi forma de decir te quiero... aunque finjas que no te enteras de este amor secreto de invierno. Volvemos a ese refugio perdido de la costa para secarnos frente a la chimenea... y nos besamos... y nos tocamos... y nos desnudamos... y muchos amos más.

jueves, 7 de febrero de 2013

MI GRAN NOCHE

Kunu de Théo Gosselin

Interior habitación noche. Suena Down de Summer Camp y saltas desnudo sobre una cama ajena. No sabes cómo has llegado allí, pero sabes que estás. Flashback. Interior bar noche. Caes del taburete después de beber hasta perder la conciencia y la dignidad. Tu último recuerdo. Volvemos al presente. Ahora estás bailando, riendo y gritando en una habitación que no conoces, sobre una cama que no conoces, compartiendo desnudez con dos chicas que no conoces. Parece que se lo están pasando bien. Sabes que cuando bebes te pones muy divertido. Dices algo y ellas ríen. Termina la canción y empieza a sonar Your honor de Regina Spektor. Ellas gritan de emoción  -como niñas pequeñas el día de reyes- y empiezan a cantar al unísono, una frente a otra, brincando entre las sábanas. Las observas y disfrutas viendo como sus pechos saltan al ritmo de la música. Arriba y abajo. Maravilloso vaivén. Te obligan a unirte. Finges hacerte el duro, pero mueres de ganas de bailar con ellas y besarlas y tocarlas y morderlas... y muchas barbaridades más. No sabes como has llegado allí y no te importa. Eres feliz. Fundido a negro.

Viene de fundido a negro. Caminas por una calle vacía. Aún es de noche, pero empieza a amanecer. Parece una noche más en una ciudad cualquiera... pero no. Es la mejor noche de tu vida. Esa noche que siempre habías soñado. Tienes un recuerdo fugaz de saliva y sudor y senos saltarines. Caes en la cuenta que cuando cuentes lo ocurrido nadie va a creerte, pero te da igual. Por una milésima de segundo incluso tú dudas sobre si es realidad o pura fantasía. No. Sabes que ha ocurrido. Hueles a alcohol y a sexo. Sonríes. Te sientes como uno de esos héroes anónimos a los que nadie reconoce sus hazañas. Eres un triunfador. Este amanecer eres el rey del mundo. Gritas de excitación y empiezas a correr para liberar adrenalina... y corres... y corres... y corres. Fundido a negro.

Fin.

[Títulos de crédito al ritmo de Mi gran noche de Raphael]

miércoles, 6 de febrero de 2013

CRECER ES ESTO

Sin título de Noah Kalina

Volver a la vida de un salto. Sentir que vas a explotar de felicidad, porque ya toca... porque lo mereces. Reír sin motivo. Escuchar esa canción de los 80's que tanto te gusta y saltar salvajemente por toda la casa en ropa interior. Bailar frente al espejo coreografías imposibles que nunca te atreverías a hacer en público (o si). Sentir todo tu cuerpo vibrando de emoción por todo lo que está por llegar... por las cosas buenas que te esperan. Gritar porque sí. Reír porque sí. Cantar porque sí. Saltar porque sí. Darte cuenta que tu momento ha llegado... notar que tanto esfuerzo ha valido la pena. Gritar, saltar, reír y llorar a la vez. Dejar atrás las cosas que te han hecho sufrir... que te han hecho llorar... que te han hecho un daño que tardarás mucho en olvidar. La felicidad es algo parecido a esto. La vida es esto. Crecer es esto.

domingo, 3 de febrero de 2013

REALIDAD Y REALISMO

Sin título de Laura Makabresku

Pequeñas heridas provocadas por amor. Sangre sobre el hielo de un invierno intempestivo. Sentimientos salvajes, vísceras deshechas y corazones arrancados del pecho. Sin aliento. Culpa y autolesión. Un golpe de realidad... una bofetada de realismo.